
Frontón y chiringuito. Con esta entrada finalizo mi selección de la temporada 2008. A Godella fui con mi primito Santi, así que tuve que buscar un motivo con bar cercano, este fue el elegido. Sol y cervecita para un día pinturero lleno de anécdotas.
Bitacora sincopada de un renacentista contemporaneo








Se acaba la temporada concursera. A partir de ahora a pintar bajo techo y dedicarme un poco a otras cosas. Debo ordenar el este taller y tengo un montón de trabajo pendiente en casa/jardín.
Esta semanas he ido a dos concursos de rápida. Aielo de Malferit (Valencia) y Murcia. No hice buenas obras. Me deje llevar por la ejecución y no medite lo suficiente. Pintar, o dibujar, sin pensar “demasiado” puede dar resultados sorprendentes y muy expresivos pero también lo contrario. Creo que la improvisación total mejor dejarla para casa, espero solucionarlo esto en los próximos concurso.






Conocí a gente nueva (y muy buena), lo pase bien y pinte este cuadro. Me concedieron el tercer premio. La foto es de móvil. Intentare conseguir una mejor.
Este fin de semana no he ido a ningún concurso, he estado en Londres por fin, después de aplazar o anular cuatro veces el viaje con perdida de billetes incluida no podía creerme que cogiese el avión. Horas antes de salir los contratiempos presagiaban la quinta anulación pero al final pudimos embarcarnos y mereció la pena. Lo pasamos muy bien. Es una ciudad que invita a vivir la calle, pasear, comer e incluso mear... todo se hace en la calle. El ambiente muy agradable y no llovió. Pudimos llevar a cabo todo el “plan de visitas”. Es una ciudad cómoda pero también cara. Como solo llevábamos equipaje de mano renuncie a mi cámara y en su lugar use la compacta de Carol. Una pena. Si hubiese intuido que era una ciudad tan fotogénica hubiese renunciado a cambiarme de calzoncillos. Aún así me desfogue apretando el gatillo, disparando como los buenos pistoleros, sin elev
ar nunca el arma por encima de la cintura. La pena es que 35mm de cañón no dan para mucho y mi puntería baja enteros cundo no apunto con mirilla, así que se me escaparon muchas imágenes por falta de angular . De todos modos siempre resulta divertido disparar indiscriminadamente ante el exceso de información, o solo empujado por esa ligera sensación que uno siente al cru









